Esta noche ha venido Gabi Pareras a despedirse. Si, puede que os parezca un poco raro, ya que por todos es bien sabido que el maestro nos dejó el pasado 26 de agosto. Pero esta noche, se ha pasado por mis sueños.

En 2019 conseguí entrar en Cartomagia club, un sueño que venía persiguiendo desde hace años. Pero el maldito 2020 truncó mi formación mágica con Gabi. Aunque pude reengancharme de nuevo a las clases gracias a la tecnología y al confinamiento.

Recuerdo que le costó mucho que mi grupo (Martes 2) entendiéramos que nos teníamos que esperar en “el bar” y que bajaría él a por nosotros. Siempre empezábamos las clases con algún chiste malo mientras subíamos las escaleras, y las peleas de Gabi con la carta llave eran épicas…

A Gabi le conocí gracias a mi amigo mágico Aleix, que me dijo que había sido alumno suyo y que le había enseñado “qué era la magia”. Des de entonces siempre que he podido, he seguido al maestro. Conferencias, actuaciones, etc… En Múrcia pude gozar a su lado de la magia de Juan Tamariz con una copa en la mano, pero como todo en esta vida, siempre queda algo en el tintero. Ahora se hace patente el refrán de “no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy”.

Lo peor de todo, es que he llegado “tarde” dos veces con Gabi.

Si hace tiempo que os pasáis por el blog, sabréis que cumplí mi sueño de entrevistar a Juan Tamariz, pero no he podido entrevistar a Gabi. Seguramente por “dejadez”, pensando que tenía tiempo de sobra de planteárselo y de hacerlo con un café.

Después, durante el confinamiento, preparé un pequeño proyecto de lettering, que quería regalarle para que lo pusiera en el estudio. Otra vez tarde. En fín…

Esta noche, estaba en una especie de reunión, había mucha gente. Algunos eran conocidos, otros estaban por conocer, pero han aparecido Gabi y Joaquin Matas, el tándem inseparable. La reunión ha ido avanzando y al final me he sentado con ellos dos en una mesa, con un café. Yo hablaba con Gabi y Joaquin le echaba azúcar al café. A mi me parecía un poco extraño ya que sabía que Gabi ya no estaba, pero al menos yo le veía, aunque parecía que era el único que lo hacía. Después me he abrazado con él. Llevaba una camisa azul, barba y sus gafas transparentes, estaba un poco más flaco de lo que recordaba, pero sus palabras resonaban en mi cabeza como un eco: “siempre voy a estar ahí para ti”.

Luego ha empezado como una especie de entrega de premios y han nombrado a un “Iñaki”, pensando que era yo, he ido a ver qué pasaba. Al volverme Gabi y Joaquín ya no estaban. Después he despertado.

No se si a vosotros también os ha visitado ya, pero seguro que si no lo ha hecho, lo hará en breve. Somos muchos de los que tiene que despedirse.

Des de que Gabi Pareras, se marchó a actuar a otro sitio. Me he propuesto recopilar el máximo de contenido suyo para poder seguir estudiándolo. Así que os pido este favor. Si queréis compartir cosas conmigo, os estaré muy agradecido. Notas de conferencias, videos, etc… todo es bienvenido.

Nada más por hoy.

Hásta la próxima, «Nen».

No olvidéis en compartir esta entrada, y todas las que queráis con vuestros amigos y conocidos. Si queréis enviarme mensajes o vuestras opiniones al respecto podéis dejarlas en el cajetín de más abajo o hacérmelas llegar por mis redes sociales (Instagram, Facebook y Twitter) y recordaros que os podéis suscribir al newsletter pinchando aquí (además si lo hacéis os mandaré un regalito por mail).

K.