Como sé que os encantan las entrevistas, hoy os traigo una pequeña charla que mantuve con Miguel Ajo, después de su show en el festival Trevol’h. Espero que la disfrutéis:
K: Bueno, Señor Miguel Ajo, profesor del Instituto de Magia, concursante en los Mundiales de Magia ¡me has dejado flipando en colores!
MA: Esa es la idea: o te quedas a cuadros o flipando en colores.
K: ¡Eso me gusta! ¿Cómo surge la idea del “Soñando en colores”?
MA: Pues muy poquito a poco… Presenté la primera vez la rutina de manera oficial para el Nacional de Granada en 2016, pero hay juegos como “La Asamblea de Ases”, que eran damas en el origen, que la tengo grabada en vídeo en el 2009. De hecho la tengo grabada con la canción Over the rainbow y en el 2012 Andost gana un premio mundial haciendo una rutina de cartas de colores con el Over the Rainbow. Evidentemente ni él me vio a mi ni yo a él, pero eso me hizo aparcar la idea de los colores porque sabía que si la presentaba todo el mundo diría que me había copiado o inspirado en él. Tenía varios juegos que tenían que ver con los colores, pero no estaban unidos en una rutina. En verano de 2015 me propuse el reto por una serie de situaciones personales de tirar para adelante y montar otra rutina de concurso. Tenía varias opciones, los Buscadores de Oro, la de los colores, etc. ninguna estaba cuajada y me decanté por la de los colores. Tenía la idea a nivel método para el final con el arcoíris para poderlo enseñar todo en el último instante… Como decía Ascanio, una vez que te centras y sabes cuál es tu meta, pues ya todo va en esa dirección: aparece el juego de las palabras, el de las damas con las damas (que me lo dijo mi mujer) y en ese momento todo lo que tiene que ver con colores, arcoíris, damas, juegos de mesa empieza a entrar en mi cabeza. Al final, cuando voy encajando toda la rutina me junto con otros magos en La Grada de mi confianza pero de perfiles muy distintos: Adrián Vega, Luis Olmedo (que vino desde Málaga sólo para eso), Carlos Vinuesa, Miguel Gómez, Armando Gómez, Gema Navarro, Pablo Basterrechea (Pablo Pinky), etc. Yo creía que la rutina estaba como para entrar a vivir. Esto era Enero/Febrero y el Nacional era en Junio, pues ese día les enseñé la rutina pero me pusieron a caldo… ¡una somanta de palos! Luis me dijo “si me llegan a dar a mí lo que te han dado a ti hoy aquí, es que dejo la magia”. Uno de los comentarios que más me hicieron era que a la rutina le faltaban emociones y, fíjate, ahora la ves y es lo que más predomina. La historia que lleva de fondo la rutina es real. Mi hermano es 2 años más mayor que yo y es verdad que a él le gusta el ajedrez, es verdad que yo no sabía porque lo mío eran las damas, es verdad que cuando él tenía 15-16 años y empieza a salir con chicas me quedé sin mi compañero de juegos y es verdad que a esa edad, 13 años, empecé con la magia. La gente me dice “es que me he emocionado”, eso es porque lo que cuento es real. Es un trabajo de años y muy poquito a poco pues va encajando y gracias a los amigos que te rodean, pues le vas sumando los detallitos hasta el resultado que tengo hoy.
K: Efectivamente, durante el show he apreciado algún detalle de Gabi Pareras y obviamente de Ascanio… Supongo que, como la mayoría de magos hoy en día, nos vamos apoyando en los hombros de los grandes maestros.
MA: Es que al final son mis referentes y es de quien yo he aprendido. Tanto Ascanio como Gabi o Miguel Gómez son algunos de mis referentes y en mi magia están. Son los que me han enseñado a pensar y me han educado como mago.
K: Ahora que estamos más tocados emocionalmente por el fallecimiento del maestro Gabi, ¿no te parece que el hecho de tener estos referentes de alguna manera es como que siempre te acompañan en las actuaciones? Que nunca estás solo en el escenario.
MA: Sí, claro. Esa Asamblea de Colores, la de veces que la habré visto con Miguel Gómez y para que él te diga que está perfecta hay que comer muchos Colacao. El origen de esa rutina es del propio Miguel porque yo tenía un juego que acababa con 4 cartas de colores. Y un día me dijo Miguel “estaría chulo que luego hicieras una asamblea con las cartas de dorsos distintos”. Pues la primera versión me costó 2 años y pico porque hasta la fecha no existía una asamblea donde cada dorso sea de distinto color. Existía la de Vernon con la baraja roja y los ases azules y ahí las cartas se pueden prestar los dorsos. Pero en esta rutina no, la amarilla es la amarilla y la verde nunca va a pasar por amarilla. Tiene mucho hándicap el abordar esta asamblea de ases lentos donde cada dorso es de distinto color. La fase final es muy exigente a nivel técnico y fue a base de írsela enseñando a Miguel hasta que me dijo “ya está, está perfecta”.
K: Siempre te veo con tus cuadros y me imaginaba que eras un fan de la música Ska. ¿De dónde salen estos cuadros?
MA: Pues, como muchas cosas en la vida, de casualidad y suerte. Cuando actuaba en escena hacía una entrada de mimo con una bolsa, globo etc. había una parte en la que intervenían los calcetines y tenían que ser llamativos para que se recordaran en la rutina. Un día encontré unos calcetines de cuadritos y por aquella época, año 2005 o 2006, empezaron a comercializar el pañuelo de cuadros blancos y negros que cuando pasa la mano se convierte en cuadritos. Ahí pensé que si pasaba con el calcetín y luego el pañuelo, etc. pues de ahí a llevar el pañuelo en el pecho de cuadros, la corbata, etc. y me metí en ese maremágnum en el que todo tiene que ver con los cuadros. Después de tanto tiempo, podría decirse que es como mi marca. Recibo muchas fotos de otros magos que me envían cosas con cuadros y les ha recordado a mí. Cuido mucho la estética en los shows, la puesta en escena y todo lo que utilizo tiene cuadritos (el bloc de notas, la botella de agua, etc.) para que haya continuidad visual.
«Ascanio como Gabi o Miguel Gómez son algunos de mis referentes y en mi magia están.»
K: ¿Qué libros recomendarías para las personas aficionadas a la magia?
MA: Depende de los gustos de cada uno, pero a la mayoría de entrada nos llama la cartomagia que está muy bien. En este caso sería el libro de Vicente Canuto, los Giobbi y para mí, los de Ascanio. Si al final quieres ir más allá que el simple juego o truco, tienes que llegar a Ascanio. Pero no sólo el Tomo 1, que está muy bien porque la teoría está ahí, pero no es suficiente para asimilar los conceptos. El libro de los juegos de Arturo y ensayarlos como si los tuvieras que representar mañana porque mientras ensayas es cuando se te mete por las venas y puedes llegar a comprender como él manejaba las herramientas. Leerlo está muy bien para que te suenen los conceptos, pero no serás capaz de que esos conocimientos formen parte de tu arsenal mágico. Igual que una doble cara o un antiderrapante, los conceptos y las herramientas de Arturo son para construir. Yo estuve 2 años aproximadamente en que solamente estudiaba a Ascanio: libros y los vídeos que eran muy difíciles de encontrar. Era material que no existe y alguien te los dejaba como la típica abuela dándote la paga de escondidas como si fuera droga, pues lo mismo. Ascanio me cambió el chip de la magia y me di cuenta que era muchísimo más profundo y enriquecedor que el simple juego y la trampita.
K: ¿Cuáles dirías que son tus magos y referentes en este mundo?
MA: Bueno, los que comentábamos antes… para mí son Miguel Gómez, Arturo de Ascanio y Gabi Pareras. ¡Y los que vengan detrás que guerreen!
K: ¿Qué consejo le darías a los lectores de mi blog? Tanto los que empiezan como los que ya llevan tiempo.
MA: Sobre todo que no tengan prisa en la magia. La magia no tiene metas a las que haya que llegar. Yo no soy profesional de la magia en el sentido que no me dedico exclusivamente a la magia ni vivo únicamente de ella. Eso me permite vivirla como un hobbie, disfruto mientras voy haciendo el puzzle no sólo cuando ya lo estoy colgando en la pared. Disfruto del proceso de creación del juego, de buscar una charla, elegir las músicas, ensayarlo, pulirlo, trabajar una técnica el tiempo que sea necesario. Es que yo no he firmado un contrato con nadie, no lo necesito para mañana y estaré ahí el tiempo que haga falta. Uno que vaya a empezar el parvulitos no puede pretender que le den la materia de la universidad porque hay que recorrer el camino y no se puede saltar. Cuando empiezas no puedes pretender hacer la última versión de un juego que has encontrado en Internet, porque no te va a valer. Hay que estudiar a los clásicos, trabajarlos, ver el feeling de la gente en las actuaciones. Te puedes tirar al último gimmick que ha salido con la cartita que hace flis-flas-flus que está bien pero con eso no vas a saber hacer magia, vas a saber hacer trucos.
K: ¡Muy interesante! Muchas gracias, Miguel!
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Hasta cuando queráis.
K.