Hoy os traigo la transcripción de una pequeña entrevista que le hice a Nano Márquez, uno de los magos que más huella me han dejado. Lo ví en el Club de la Mágia, en el Teatreneu, hace más de 10 años y aún recuerdo su espectáculo.
Se presentó la oportunidad de sentarme con él en un bar y hablar de magia. Y después de mucho hablar este fue el resultado:
– K: Preséntate un poco para que los lectores sepan un poquito más sobre ti:
– Nano: Pues, soy Nano Márquez en la actualidad tengo 45 años soy de Sevilla pero vivo en la provincia de Barcelona, en Viladecans concretamente.
– K: Cuanto tiempo llevas metido en la Magia?
– Nano: Vamos ya para los 20 años.
– K: Cómo fue el paso a los escenarios?
– Nano: El mío fue muy cortito, básicamente porqué digamos que personalmente tengo cierta capacidad de imitación. Tengo gran capacidad de imitación, pero mi psicomotricidad no es que sea una barbaridad, no es mala, pero tampoco es una barbaridad. Consciente de esto lo que hago es practicar bastante algo que me interesa. Porque entiendo que hay muchas personas que a lo mejor en 2 días tienen esa técnica manual al pelo. Yo no, yo necesito un poquito más.
Sin embargo otro tipo de técnicas como la técnica de comunicación, la técnica teatral, en esa no necesito tanto. Qué pasa, claro, yo vengo del teatro desde mucho antes, desde pequeño. Esa parte la tengo mucho más por la mano y no tengo que practicarla tanto.
Cuando era principiante, en el momento en el que conseguí cierta práctica manual, con miedo cero al escenario, con miedo ninguno. Pues no me costó, la verdad no titubeaba, a la hora de subirme a un escenario. Sí te digo que, claro, siempre hay un poco de responsabilidad que te impone. Yo siempre he percibido que es una cuestión de responsabilidad, más que de miedo. Tienes gente delante que espera ver algo y espera divertirse, y tú se lo tienes que dar. Están ahí por ti y para ti y tu te debes a ellos. Así que eso es parte del pacto. Como ya te digo esto a mí tampoco me ha causado mucho temor ni mucho recelo, pues pasar de lo que es la práctica de mi salón a una escena enfrentándome a gente tampoco fue muy traumático.
– K: Quienes son tus magos referentes?
– Nano: Yo soy autodidacta, prácticamente. Bueno prácticamente no, al 100%. En gran parte, en todo lo que hago en mi vida, soy muy autodidacta.
Eso no significa que no pueda beber de otras fuentes. Y he de reconocer esas fuentes además. Porqué muchas veces alguien que es autodidacta, le cuesta muchísimo decir “yo mira, esto lo aprendí de …” o “ Esta persona me descubrió tal cosa”. Quizá por seguir alardeando de su espíritu autodidacta.
– K: Pero todos nos inspiramos en alguien.
– Nano: Puedes ser autodidacta, pero dale crédito a quién lo tiene que tener.
Yo ya te digo como inspiración, inspiración mía personal, vuelvo a decirte lo mismo, vengo del teatro, y yo como personaje ya estaba muy marcado, ya lo tenía muy hecho. Pero en el resto de cosas te voy a decir por ejemplo, yo que empecé en Sevilla, los magos de la vieja hornada sevillana. Supusieron mucho “pa” mi. Supongo que porqué para los nuevo magos eran muy accesibles. No tenían problema en sentarse contigo y contarte sus batallas en el mundo de la magia, que siempre son muy interesantes de escuchar. Y además de contarte técnicas y cosas que están perdidas en la memoria de los magos de ahora, y que ellos las tienen allí muy “atesorás”, cuando muestras un poquito de interés pues ellos te las muestran y te las enseñan.
Entonces Faustino Palmero, por ejemplo. Era un crack con las bolas y el tahúrismo. Rafael Sánchez Gamez, no sé, mucha gente. Vicente Canuto, el escritor de Cartomagia fundamental. Recuerdo grandes sesiones sentado con Vicente en el Magia y música en Sevilla. Contando cosas de manejos sencillos de monedas pero a la vez sutiles y elegantes. Entonces toda esta vieja hornada, vamos a llamarles así, la vieja guardia de la magia sevillana. Aprendí mucho.
En cuanto a lo demás siempre he sido más de acoger lo que me llega por vía directa que lo que me llega por los medios. Entonces generalmente, cosa que está muy bien, la gente suele inspirarse en magos que ven en los medios. Este no es mi caso, a pesar de que por supuesto he aprendido de quién hemos aprendido todos, claro, ahí siempre hay una fuente de datos importantes, como Juan, por supuesto, como Tamariz.
– K: Prefieres la magia de escena/salón o la magia de cerca?
– Nano: Escena, básicamente soy mago de escena. Ya te digo que ahora tengo un espectáculo de magia de cerca. Y siempre he hecho magia de cerca. Profesionalmente he hecho magia de cerca, pero a la hora de desarrollar un espectáculo mío para presentarlo, hasta ahora siempre ha sido de escena y de escena eminentemente de salón. Tengo un espectáculo con aparatitos y cosas así más para grandes escenarios, pero eminentemente soy de escena salón.
– K: de “escena de cerca”
– Nano: Sí, sí, de escena íntima, de escena cercana. Creo que es el formato en el que mejor me desenvuelvo y en el que más agusto estoy.
– K: Cartas o monedas?
– Nano: Ai, recórcholis! Mira visto que… Te voy a decir que ambas. Pero la verdad es que me encantan las cartas, lo que representan las cartas. Las historias que se pueden contar con una carta, osea con cartas, por lo que es la carta en sí ¿eh? Es fantástico, es poético, es maravilloso.
También se puede aplicar magia a las monedas, pero bueno, digamos que como objeto una carta puede ser más evocadora que una moneda. Así a botepronto, pasa que, todo lo que le quieras aplicar a las monedas depende de ti y de tu capacidad de creador de emociones. Claro como esto me supone un reto pues voy a decirte que las monedas me resulta muy atractivas.
Y luego creo que, para mí tienen una dificultad técnica mayor que las cartas. Las técnicas, creo que con las cartas con 2 o 3 técnicas puedes hacer cosas muy decentes. Sin embargo, las monedas esas 2 o 3 técnicas para hacer cosas “decentes”, ostras! son complicadas. Hay que echarle tiempo.
– K: Coleccionas barajas?
– Nano: No. Tengo mi primera baraja, de cuando empecé, es una Bee, sin orla en el dorso. Una Bee de casino. Y tengo alguna cosa más, porque me ha llamado la atención. Como por ejemplo la baraja de caricaturas de Idígoras. O alguna cosita más, pero coleccionar no colecciono.
– K: Yo si colecciono, de echo ,he traído la baraja que me firmaste hace tiempo.
– Nano: Ostras! Que guay que la guardes!
– K: Sigues aprendiendo rutinas nuevas? Cómo las estudias?
Por supuesto! Las desgrano, las separo en trocitos. Intento mirar y reconocer cuales son las técnicas. Intento reconocer cuales son los condicionamientos y los refuerzos asociados a esas técnicas para el momento de ejecutarlas controlar los momentos de atención y las distracciones. Veo como puedo cambiarlas, porque generalmente el creador de la rutina ha puesto una técnica que es fantástica “pa” él. Y a mí me va a costar, pero bueno, cualquier técnica que un creador de una rutina, ponga en esa rutina puede ser sustituida por otra, que quizás te vaya mejor. Pues entonces ahora yo tengo que saber qué técnica tengo que sustituir por una mía, y ahora tengo que saber aplicarle los condicionamientos y los refuerzos propios a esa técnica, que yo he puesto, para que surtan el mismo efecto que surtían con la técnica original.
Durante el proceso, que no es ni antes ni después. Esto es como: “¿Oye qué escribes antes la música o la letra?”. Qué haces primero? Piensas primero en la presentación y luego haces el número? O haces el número y luego le aplicas una presentación, no?
Para mí esto va un poco parejo. De echo la rutina mecánica, mecánicamente hablando, es transformable por la presentación que tu quieras aplicarle. Y la presentación es moldeable dependiendo de las técnicas que a ti te vayan a ir bien para hacer la rutina.
– K: Y quién hizo “Ese” truco que aún guardas en tu memoria y que te dejó alucinado? Y cuál fue?
– Nano: Recuerdo muchos, pero realmente cuando te hacen esta pregunta se refieren a: “¿Que mago te hizo un juego que no sabías como se hacía?” Pero, me explico. Generalmente la gente dice, este me hizo un juego que me dejó (0.0)… Yo no. A mi hay juegos que me dejan patidifuso a pesar de que pueda saber como se hace. Cuando me enfrento a un juego que me hace alguien, no voy a buscar en primera instancia el cómo. Ya tu ojo, si eres un mago experimentado, lo delata por sí solo. Entonces tu mente tiene que obviar esto: “Ah vale aquí ha hecho un no se qué” . Tu mente tiene que obviarlo, para poder seguir. Para mí, la verdadera alma de la magia es la presentación. Si yo me estoy fijando y analizando, me estoy perdiendo todo lo que realmente me interesa y todo lo que realmente que me resulta artístico de la magia.
Entonces hay rutinas y juegos que me han maravillado, que me han dejado increíble de boquiabierto a pesar de poder seguir el procedimiento.
Y te voy a decir que me encanta, que me chifla la rutina original de Jason Bairn. El numero de manipulación.
Pero no el de ahora que saca un guacamayo al final, el que sacaba una oca al final. Me parece que esa rutina, esa estructura me parece increíble, me parece fantástica! Es muy difícil en escena, callado con un número musical en el que, haciendo manipulación donde hay un marco visual muy claro, que eres tú, manejar las distracciones y hacer que el público mire al punto concreto para que tu puedas ejecutar lo que sea.
Es difícil esto, en escena es difícil. Y sin embargo como te he dicho antes cuando desgranas esta rutina, simplemente con haber girado la cabeza, ya ha hecho lo que tenía que hacer. Y de repente ves que hay un gesto, que técnicamente no cubre nada pero, era necesario este gesto. Porque cuando está haciendo lo de la bola de plastilina, que va a sacar una paloma, cuando ya tiene la bola hecha. Él está de perfil, dándole el hombro derecho al público, llega un momento que cuando termina de formar la bola, se para un microsegundo y mira al lado opuesto de la platea, se ríe y sigue.
Eso que es una cosa que cualquiera puede decir, “y para qué?”. Es que estoy perdiendo el contacto visual con esa parte de la platea. Osea, la gente está viendo la bola, pero no me está viendo la cara y no les estoy prestando atención. Como se dice en los cinco puntos mágicos, no estoy tensando esos hilos. Esa mirada no la estoy manteniendo, y ya ha pasado demasiado tiempo. Quizá estoy en el límite, en el que la gente pueda perder la atención. Me paro, miro y me río. Hay complicidad en ese gesto, intento atraerlos de manera personal.
Esas cositas a mí me maravillan. Me encanta verlo! Creo que es una de las cosas que todo mago tendría que tener en cuenta.
Y cuando veo esa rutina, y veo como está construida, y me doy cuenta de esos detallitos, pues me quedo maravillado y es una rutina que no me canso de ver. De vez en cuando me la pongo para disfrutarla.
– K: Qué opinas sobre la “nueva magia”, magia en la calle y demás tendencias?
– Nano: A mi me parece muy bien que se haga magia en la calle me parece fantástico y maravilloso.
– K: Pero?
La de verdad me refiero, la magia de verdad. Lo que pasa es que parece que llevarla a la calle, como que la informaliza un poco, vamos a cosas muy directas.
Voy a distinguir entre magia de calle y magia callejera.
Magia de calle: Hay grandes profesionales de magia de calle, que tienen sus espectáculos de formato salón, que en inglés le llaman “parlor”. Que es verdadera magia de calle, hacen una pequeñita platea, la gente se pone alrededor y entonces hacen un espectáculo.
O hay magos de cerca que hacen magia de calle.
Cuando digo magia de calle es que no se ha descuidado nada. Todo lo que hemos hablado antes del arte, de la implicación personal del mago con el espectador, sigue vivo. Esa manera de contar historias, esa manera de querer mover otros sentimientos a parte de la sorpresa. Eso sigue, tiene que seguir en la magia de calle.
Creo que la magia callejera, ha dejado un poco de lado esto. Es una magia un poco mas directa, que apela a la sorpresa eminentemente. Es una magia técnica y virtuosa generalmente en los manejos, la verdad que ahora no se ni como le llaman a esto, “cardistry”, esto de hacer virguerías con las cartas. Bueno, ese virtuosismo no va mucho conmigo, me parece perfecto que la gente lo haga, no tengo mayor problema, pero creo que en la magia callejera, esto se ha descuidado un poco.
Sin embargo sí que se pueden seguir haciendo cosas artísticamente de alto nivel de esa manera cercana. Intentar no hacer tanta magia callejera, cuando digo callejera me refiero, voy a poner un ejemplo, como David Blaine o la magia callejera de Dynamo. Para mí voy a catalogar esto como magia callejera. Básicamente es un truco donde buscas una sorpresa, pero tampoco estás queriendo decir nada emotivo, nada extra, que le dé que pensar al espectador de manera existencial. Más allá del “OOH cómo lo ha hecho?”.
– K: Al fnal el “cómo lo ha hecho” es “lo de menos no?
– Nano: Lo importante es la presentación.
– K: Qué libro no puede faltar en una biblioteca mágica?
– Nano: Si estás empezando y te gustan las cartas, Cartomagia fundamental de Vicente Canuto.
– K: Tengui.
– Nano: Magia y presentación de Nelms?
– K: Falti.
– Nano: A pesar de que es información encotnrable en otros sitios, voy a decir los 5 puntos mágicos. Digamos que Juan la ha destilado y la ha puesto ahí, en un pequeño libreto que es de lectura muy fácil. Y si estás empezando en el mundo de la escena, bueno y en el que no es de escena, te puedes cubrir muchas cosas.
Y para mí, porqué le tengo un cariño especial a ese libro. Fue el libro que me enseñó el triple vuelo gigante, además lo digo en el espectáculo, en cualquier formato, de George Kaplan. “El arte de la magia”, el que se conoce en el mundo de la magia como el Kaplan.
– K: A qué mago no me puedo perder?
-Nano: Yo creo que no te puedes perder un espectáculo de Lance Barton, Jason Bairn y en mentalismo Derren Brown.
Muchas gracias por aceptar esta pequeña entrevista.
Espero que sirva para que los lectores del blog, descubran que hay mucha magia, y muy buena. Y que la disfruten tanto como yo lo hago. Así que gracias otra vez y espero que nos volvamos a ver pronto!
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K.